La presión arterial es una medida importante de la salud cardiovascular y se compone de dos valores: la presión sistólica y la presión diastólica. La tensión arterial alta o baja puede ser un signo de problemas de salud y es importante saber cómo controlarla y medirla.

La tensión arterial alta, o hipertensión, ocurre cuando la presión arterial es demasiado elevada. Si se deja sin control puede aumentar el riesgo de enfermedades del corazón y accidentes cerebrovasculares. La hipertensión no suele tener síntomas, por lo que es importante medir la presión arterial regularmente para detectarla.

Por otro lado, la tensión arterial baja, o hipotensión, puede ocurrir en personas sanas, pero también puede ser un signo de problemas de salud subyacentes. La hipotensión puede causar mareos, debilidad y fatiga.

Hay varias formas de controlar la presión arterial, como mantener una dieta saludable y hacer ejercicio regularmente. Limitar el consumo de alcohol y tabaco también puede ayudar a reducir el riesgo de hipertensión. Si es necesario, los médicos pueden recetar medicamentos para controlar cada caso.

Medir la presión arterial es un proceso fácil y no invasivo que se puede hacer en casa con un tensiómetro de brazo o muñeca. Se recomienda medirla regularmente para detectar cualquier cambio en la tensión arterial. Y siempre es recomendable consultar con un médico si se tiene alguna preocupación al respecto.